EL TIRO EN BALONCESTO: IMPORTANCIA Y CLAVES METODOLÓGICAS

El baloncesto es un juego de colaboración-oposición en el que las acciones técnico-tácticas ofensivas y defensivas se suceden constantemente. El objetivo genuino de nuestro deporte es alcanzar con el móvil, nuestro balón de baloncesto, la meta que en nuestro caso es una canasta colocada a 3,05. Para ello, disponemos de numerosos medios técnico-tácticos colectivos e individuales complejos y simples para lograr una mayor anotación que nuestro rival. Dentro de los recursos técnicos o fundamentos de los que disponemos, creo que el tiro a canasta es fundamental y que probablemente no se invierte el tiempo suficiente en su potenciación o trabajo. Es habitual ver cómo vamos dando volumen de tiro pero alejados de una situación competitiva que tampoco están encaminados a la mejora de la técnica del mismo. La repetición sistemática sin corrección no sirve para nada, incrementar la efectividad en nuestro lanzamiento no depende exclusivamente de acumular más y más tiros, sino de conocer cuáles son los aspectos básicos que hay que entender y trabajar para alcanzar una gran eficacia en el mismo.

Por estos motivos que he destacado voy a señalar una serie de claves que considero fundamentales a la hora de practicar, analizar y aprender el lanzamiento a canasta.

¿Cómo puedo crear automatismos en el lanzamiento a canasta?

• Vemos cómo los grandes tiradores en cualquier situación de juego independientemente de la oposición o la situación llevan a cabo una rutina de tiro similar, debido a esos automatismos adquiridos a lo largo del tiempo. Para ello, es necesario tener la necesidad insaciable de mejorar marcándose objetivos a corto, medio y largo plazo a la hora de ejecutar un lanzamiento a canasta y “sentir” cada lanzamiento (imaginarlo) y hacerlo con regularidad.

Imaginar el lanzamiento

Imaginar el lanzamiento no es únicamente un proceso mental, sino que conlleva una serie de procesos físicos y mentales que van desde el sentir el balón en contacto con la yema de tus dedos hasta la visualización de éste dentro del aro. Podríamos catalogar esta fase de imaginación del lanzamiento, sentir el mismo, como la primera fase de la preparación.

Aspectos técnicos del lanzamiento

Reducir los fundamentos a compartimentos estancos es un error. No creo en los modelos a la hora de la enseñanza de cualquier recurso, aunque sí hay innumerables patrones motrices que sí se han de considerar como el golpeo de muñeca (efecto magnus), la extensión corporal, etc.

Postura: siempre se nos ha dicho que el lanzamiento empieza desde los pies hacia arriba, una afirmación cierta ya que la adquisición de una buena base de sustentación es fundamental para alcanzar un lanzamiento equilibrado y nos permita ejecutar unos patrones motrices más eficaces a la hora de ejecutar el lanzamiento. Una base con los pies demasiado juntos o demasiado separados no nos permitirá ejecutar un lanzamiento adecuado, disminuyendo la potencia y velocidad gestual necesarias como consecuencia de la oposición que se da en baloncesto. Hay que mantener una buena linealidad entre aro, pie dominante, robilla, cadera, hombro y balón eliminando movimientos innecesarios que resten velocidad y fuerza. Será necesario flexionar ligeramente las rodillas e inclinar el tronco hacia delante, evitando estar demasiado erguidos y rígidos en el lanzamiento permitiendo que sea ejecutado de forma muy natural.

Muñeca, codos, hombros, mano de tiro: la mano de lanzamiento ha de coincidir con el centro del balón (tomando como referencia la válvula del balón situaremos dedo índice y corazón a una y otro lado de la misma) descansando éste sobre las puntas y yemas de los dedos. Formaremos una L entre cabeza y el brazo de tiro. La colocación del codo es fundamental para la eficacia del lanzamiento. El codo coincidirá con la punta del pie dominante. Una vez en la postura adecuada del brazo, flexionaremos la muñeca. A la hora de ejecutar el lanzamiento, se producirá una extensión del codo de manera que éste se sitúe por encima de la ceja. Para ganar tiempo, será fundamental la preparación para recibir, donde mantendremos una postura de ofrecimiento hacia el balón con el cuerpo flexionado y orientado. Para la mejora del mismo y adquisición de estos patrones es fundamental el trabajo del lanzamiento a una mano, para adquirir esa rutina de flexo-extensión del tronco, rodillo, codos y muñeca. La mano de apoyo sólo equilibra el lanzamiento. Formaremos una letra T entre los pulgares de la mano de apoyo y mano de tiro. La primera, se situará lateralmente, NO POR ENCIMA, al balón con la yema de los dedos en contacto con ésta.

Acompañamiento del lanzamiento: es la parte final del lanzamiento que aporta ese toque de calidad y brillantez al lanzamiento pues es el toque decisivo del mismo. El codo se extenderá completamente y el hombro se flexionará a la par que la muñeca se flexiona. Este golpe de muñeca es que el aporta altura al lanzamiento y un mayor ángulo de entrada, es el conocido como Efecto Magnus, debido a las presiones que se generan con el giro del balón en trayectoria dispar a la del movimiento lo que permite un lanzamiento parabólico. Para su mejora, es necesario mantener los brazos en esa postura después del lanzamiento para así interiorizar todo el movimiento.

CONCLUSIONES

Creo que estas claves son la base para la construcción de ejercicios adecuados de cara a la mejoría de nuestro lanzamiento. Los ejercicios son importantes, pero el conocimiento de las características técnicas nos ayudará a pensar ejercicios atractivos para el niño que le ayuden a desarrollar, adquirir e interiorizar esos patrones motrices en situaciones competitivas. Fundamental será entender la formación y el conocimiento de los fundamentos como el tiro, el pase, el dribling, los desplazamientos defensivos, fintas, etc. como un proceso a largo plazo que NUNCA acaba. Para que el jugador piense así, habrá que dotarle de conocimientos y sobre todo de ejercicios que les resulten divertidos, atractivos y útiles.